La Ley de Segunda Oportunidad es una herramienta legal diseñada para ayudar a personas físicas y autónomos a cancelar sus deudas cuando se encuentran en situación de insolvencia. Sin embargo, no todos los que inician el proceso logran obtener la exoneración. ¿Por qué? Porque muchos cometen errores que, aunque parezcan pequeños, pueden hacer que el juez deniegue el beneficio de cancelación de deudas.
En este artículo te explicamos los 10 errores más frecuentes que pueden arruinar tu derecho a una segunda oportunidad… y, lo más importante, cómo evitarlos desde el primer momento.
Error 1: No demostrar insolvencia real
Uno de los pilares del proceso es que el solicitante esté en situación de insolvencia actual o inminente. Esto significa que no puede hacer frente regularmente a sus obligaciones de pago. Si el juez detecta que todavía tienes ingresos estables, o bienes cuyo valor es muy superior al total de tus deudas y con los que podrías afrontar tus pagos, es probable que rechace tu solicitud.
¿Cómo evitarlo?
Reúne toda la documentación que justifique tu situación económica: extractos bancarios, nóminas, certificados de desempleo, gastos mensuales, etc. Cuanto más clara y completa sea la información, más fácil será acreditar la insolvencia.
Error 2: Ocultar ingresos o bienes
Ocultar información patrimonial o ingresos supone un grave incumplimiento del deber de colaboración. Si se descubre, puede considerarse mala fe y suponer la denegación o incluso revocación de la exoneración.
¿Cómo evitarlo?
Sé completamente transparente con tu abogado y con el juzgado. Si has vendido un bien o transferido dinero en los últimos años, debe estar reflejado en la documentación. La honestidad es clave.
Error 3: No actuar con buena fe
La buena fe es un requisito esencial para acceder a la exoneración del pasivo insatisfecho. Esto implica no haber generado las deudas de forma dolosa o negligente grave, colaborar con el juzgado y con la administración concursal, y no haber cometido delitos económicos en los últimos años.
¿Cómo evitarlo?
Comprueba con tu abogado si tu actuación ha sido de buena fe respecto de lo establecido en la Ley Concursal; y colabora activamente con el proceso, responde a los requerimientos y actúa con transparencia desde el inicio.
Error 4: No tener más de un acreedor
Un requisito legal para poder presentar tu concurso y luego solicitar la concesión del EPI es que tengas un solo acreedor, por muy elevada que sea la suma de la deuda. En ese caso no se da el presupuesto básico de un concurso, y es la existencia de una pluralidad de acreedores; por ello, al menos has de tener dos para que exista concurrencia y se pueda continuar en un concurso.
¿Cómo evitarlo?
Consulta con un abogado especializado para que valore si la deuda se ajusta a ese requisito. Esto es clave para no perder tiempo ni derechos.
Error 5: Incluir deudas no exonerables como si lo fueran
No todas las deudas pueden cancelarse. Por ejemplo, pensiones alimenticias, multas penales, o indemnizaciones por responsabilidad civil derivada de delito son no exonerables. Y las deudas con Hacienda o Seguridad Social solo pueden exonerarse hasta ciertos límites
¿Cómo evitarlo?
Revisa detalladamente con un abogado la naturaleza de tus deudas. Presentar un listado incorrecto o incompleto puede afectar al proceso.

Error 6: No presentar la documentación completa o actualizada
El proceso exige una gran cantidad de documentación: declaraciones de la renta y otros formularios fiscales si eres autónomo, relación de bienes, relación de deudas, ingresos, contratos, saldos bancarios… Presentarla incompleta puede suponer la inadmisión o archivo del procedimiento.
¿Cómo evitarlo?
Coordina con tu abogado para reunir y revisar cada documento. Es esencial que todo esté bien ordenado, vigente y completo.
Error 7: Contratar asesoría no especializada o poco transparente
Muchas personas recurren a empresas o “gestorías” que no están formadas en derecho concursal, y que prometen resultados rápidos y seguros sin evaluar adecuadamente el caso.
¿Cómo evitarlo?
Asegúrate de contar con un abogado colegiado y especializado en Ley de Segunda Oportunidad. La experiencia y la transparencia marcan la diferencia.
Error 8: Repetir el proceso antes del plazo legal
La ley establece que no se puede solicitar la exoneración nuevamente hasta transcurrido un plazo de 2 años (para exoneración provisional con plan de pagos) o 5 años (para exoneración definitiva), salvo que el intento anterior fuera rechazado por motivos formales.
¿Cómo evitarlo?
Si ya te has acogido anteriormente a un EPI, asegúrate de que ha transcurrido el tiempo legalmente exigido. Si tienes dudas, consulta con tu abogado antes de iniciar cualquier trámite.
Error 9: Solicitar la exoneración cuando hay condenas por delitos económicos recientes
La ley excluye la exoneración si el deudor ha sido condenado por delitos de falsedad documental, contra la Hacienda Pública, la Seguridad Social o el patrimonio en los últimos 10 años, salvo que haya satisfecho la responsabilidad civil derivada.
¿Cómo evitarlo?
Consulta con tu abogado si tienes antecedentes penales. Es posible que haya que esperar o acreditar el cumplimiento de ciertas condiciones.
Error 10: No cumplir con el plan de pagos, si se ha pactado uno
Si la exoneración se concede condicionada a un plan de pagos, su cumplimiento es obligatorio. El incumplimiento injustificado puede provocar la revocación de la exoneración.
¿Cómo evitarlo?
Antes de aceptar un plan, asegúrate de que puedes cumplirlo. Si hay un cambio de circunstancias, infórmalo de inmediato. La buena fe también se demuestra en esta fase.
¿Me bloquean la cuenta si solicito la Ley de Segunda Oportunidad?
No. Solicitar la Ley de Segunda Oportunidad no implica automáticamente el bloqueo de tus cuentas bancarias. Sin embargo, durante el procedimiento judicial, especialmente si se entra en concurso, puede haber limitaciones puntuales para proteger el patrimonio del deudor y los intereses de los acreedores.
Estas medidas son temporales y controladas por el juzgado, y no afectan a todos los casos. Es muy importante estar bien asesorado para evitar bloqueos innecesarios o problemas con el uso de tus cuentas.
Si tienes ingresos inembargables, como el salario mínimo, puedes seguir usando tu cuenta con normalidad. Para evitar sustos, asesórate desde el primer momento con un abogado especializado.
Conclusión y consejos finales
La Ley de Segunda Oportunidad puede cambiar tu vida si estás sobre endeudado, pero también puede fallar si no se aplica correctamente. Muchos casos se rechazan no por falta de derecho, sino por errores evitables como los que hemos visto: falta de documentación, mala fe, elección inadecuada del procedimiento o asesoramiento deficiente.
Por eso, si estás pensando en cancelar tus deudas, hazlo bien desde el principio. Infórmate, sé transparente y busca apoyo legal especializado. Un error puede costarte tu segunda oportunidad, pero con el acompañamiento adecuado, puedes empezar de nuevo sin cargas ni estrés.
¿Tienes dudas? Contacta con nuestros abogados expertos en cancelación de deudas y empieza hoy mismo tu camino hacia la libertad financiera.